El fenómeno de Raynaud se debe al espasmo de las arterias digitales tras el contacto con el frío. El cambio de coloración en las extremidades es episódico y pasan en pocos minutos del blanco al azul y al rojo sucesivamente.

La acrocianosis consiste en la coloración cianótica de las manos y pies. Normalmente se trata de una anomalía transitoria tras la exposición al frío. A menudo existe una historia familiar, lo que sugiere una base genética.

La perniosis o eritema pernio, más conocido como sabañones, se caracteriza por la aparición de lesiones maculopapulosas, eritematosas y con frecuencia pruriginosas y dolorosas de distribución simétrica. Se produce por una respuesta anormal al frío y a la humedad. Las zonas más afectadas son la cara dorsal y lateral de los dedos de manos y pies, la superficie palmoplantar y otras zonas acrales, como la nariz o los pabellones auriculares^1,2. Puede presentarse en el contexto de diversas enfermedades sistémicas o como un trastorno aislado en un individuo sano. En estas ocasiones, se denomina perniosis idiopática, como es el caso presentado. El diagnóstico de esta entidad es clínico, reservando la biopsia para los casos que ofrezcan dudas. La medida terapéutica más importante es la protección frente al frío. De forma empírica se usa la aplicación de corticoides tópicos, con buenos resultados. El tratamiento sistémico con bloqueadores de los canales de calcio, el más usado el nifedipino, se reserva para los casos más graves. El curso clínico generalmente es autolimitado, tendiendo a resolverse en varias semanas³.

La dermatomiositis juvenil es una enfermedad autoinmunitaria caracterizada por la inflamación crónica de la piel causando lesiones cutáneas características: pápulas de Gottron y eritema heliotropo. Además, asocia debilidad simétrica de la musculatura proximal, elevación sérica de las enzimas musculares y electromiograma compatible con miopatía y denervación. El caso presentado no cumple dichos criterios diagnósticos.