El exantema periflexural asimétrico es una erupción cutánea más frecuente en la edad prescolar (1-5 años), predomina en niñas y en las estaciones de invierno y primavera^1,2. Es un exantema papuloso, escarlatiniforme, morbiliforme o eccematoso en áreas de flexión (axilar la más frecuente, pudiéndose extender hacia tronco o miembro superior homolateral), suele ser unilateral y respeta palmas y plantas. De forma muy ocasional podría ser bilateral o generalizado. Es asintomático en la mayoría de los casos, pudiendo cursar con prurito, fiebre o linfadenopatías. El diagnóstico es clínico, no precisa pruebas complementarias para su confirmación. Su resolución es espontánea en 4-6 semanas o incluso hasta 12 semanas. No requiere tratamiento específico, solo sintomático, con antihistamínicos orales en caso de prurito. Es una entidad infradiagnosticada, debido a su etiología desconocida y a su curso benigno y autolimitado.

El síndrome de Gianotti-Crosti se caracteriza por lesiones papulovesiculares asintomáticas de distribución simétrica bilateral en la cara, nalgas y superficies extensoras de las extremidades, de color rosado. Causado por virus y de carácter benigno y autolimitado.

La dermatitis de contacto es la consecuencia del contacto con una sustancia química. Las lesiones pueden ser en forma de pápulas, placas, vesículas, ampollas, erosiones, costras, muy pruriginosas. La historia clínica y la exploración es la base para el diagnóstico.

El exantema de la escarlatina³ es un exantema eritrodérmico, micropapuloso, confluente, escarlatiniforme y de tacto rugoso, más acentuado en pliegues y flexuras, respetando el triángulo nasolabial, acompañado de fiebre y faringoamigdalitis.