El tumor glómico o glomangioma es un tumor benigno infrecuente, derivado del cuerpo glómico neuromioarterial. Desde el punto de vista clínico, son tumores de pequeño tamaño, violáceos, subcutáneos y que cursan con una tríada característica de sensibilidad al frío, hipersensibilidad localizada y dolor paroxístico grave. Aunque no siempre están presentes todos los síntomas, el dolor es el síntoma predominante. Afectan con más frecuencia a pacientes de edad media, si bien se han descrito en todas las edades. Pueden clasificarse en dos variantes clinicopatológicas: solitarios o múltiples. Los primeros son los más frecuentes y se localizan en cualquier parte del tejido celular subcutáneo, aunque aparecen predominantemente en zonas acras, habitualmente en la región subungueal³. Los múltiples representan el 10% de los casos y generalmente se heredan con un patrón autosómico dominante con expresividad variable y penetrancia incompleta. En el diagnóstico la historia clínica y la exploración son claves, pero éste se confirma mediante el estudio histológico, como es nuestro caso. El tratamiento es la exéresis quirúrgica^1-3.

El melanoma maligno es un tumor poco frecuente en niños (solo un 2% de los melanomas se presentan en menores de 20 años). Puede aparecer de novo o asociado a ciertas lesiones melanocíticas previas. Se presenta habitualmente como una pápula o nódulo de rápido crecimiento, de color marrón oscuro o negro y los criterios ABCD (asimetría, bordes, color, diámetro) para lesiones melanocíticas también son aplicables en la edad pediátrica. Clínicamente pueden asociar prurito, ulceración o sangrados de la lesión⁴.

El nevus azul es una lesión benigna constituida por acúmulos de células névicas cargadas de melanina en región dérmica. Clínicamente se manifiesta como una mácula, pápula, nódulo o placa de tonalidad azul o grisácea, usualmente menor a 1 cm⁴. Puede localizarse en cualquier zona del cuerpo, aunque es más frecuente en dorso de manos y pies. Es de aparición gradual y asintomática.

El angioqueratoma es una lesión vascular benigna, formada por vasos capilares dilatados subepidérmicos, asociados a reacciones epidérmicas como acantosis e hiperqueratosis. Son pápulas rojovioláceas con superficie verrucosa y excepcionalmente producen picor o quemazón⁵.