A las 3 semanas el paciente consulta por un nuevo episodio de hipersomnia-somnolencia. En la anamnesis se detecta además ánimo depresivo, apatía, mutismo, respuestas inapropiadas y lenguaje lento, así como desrealización, con sensación de extrañeza de su cuerpo, su voz y alteración de la percepción del entorno. Reinterrogando a la familia, se constata que esta sintomatología ya estaba presente en el episodio anterior.
Se amplía el estudio con pruebas complementarias. Posteriormente presenta de nuevo la desaparición progresiva de la somnolencia, persistiendo alteraciones conductuales leves que se normalizan de forma progresiva hasta su alta a los 5 días.