Como segundo ciclo de tratamiento a estos pacientes, se indicó metronidazol a 15 mg/kg/dosis cada ocho horas durante ocho días, con buena adherencia farmacológica. La niña continuó asintomática y, en el caso del lactante, se objetivó en revisiones posteriores una buena curva de peso con exploración normal, manteniendo deposiciones blandas ocasionalmente. En las heces recogidas a los tres meses postratamiento, aparecieron nuevamente formas de Giardia intestinalis en ambos pacientes.
En este caso se les indicó un tercer ciclo de tratamiento, con quinacrina a 2 mg/kg/dosis cada ocho horas durante siete días. En las revisiones sucesivas, en el caso del lactante se normalizaron las heces y no recurrió la diarrea. En ambos hermanos los análisis microbiológicos dieron resultados negativos, en esta ocasión, a las dos semanas y también a los tres meses. Fueron por lo tanto dos casos de giardiasis intestinal con una cepa que, sospechamos, fuera resistente a metronidazol, con buena respuesta a tratamiento con quinacrina.
¿Cuál es su diagnóstico definitivo?
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