El cuadro clínico que se describe es un cuadro de dispepsia funcional, en su variante de síndrome de dolor epigástrico, descrito en los criterios Roma IV para los trastornos funcionales digestivos. La presencia de al menos uno de los siguientes síntomas (sensación de plenitud gástrica posprandial, saciedad precoz, dolor o ardor epigástrico no relacionado con cambios en la defecación, que no se puedan explicar por otra condición médica tras una adecuada evaluación) durante al menos 4 veces al mes a lo largo de 2 meses, sin presencia de signos o síntomas de alarma asociados, son suficientes para establecer el diagnóstico. No se ha establecido relación entre la infección por Helicobacter pylori y los síndromes de dolor abdominal funcional.

El test no invasivo para la detección de Helicobacter pylori solo está indicado en la comprobación de erradicación de la infección tras haber realizado tratamiento.

El objetivo de realizar endoscopia es el de descartar patología orgánica ante síntomas o signos de alarma asociados a la clínica de dolor abdominal, que el paciente del caso descrito no presenta. En caso de que durante la misma encontrásemos alteraciones sugerentes de la infección (erosiones, úlceras o nodularidad antral) estaría justificada la toma de biopsias para realizar cultivo y antibiograma de cara a plantear terapia erradicadora.

El diagnóstico del cuadro que presenta el paciente puede establecerse a través de los criterios Roma IV para la dispepsia funcional, sin necesidad de realizar otras pruebas complementarias, tal y como se especifica en la respuesta 1. La ausencia de signos o síntomas de alarma hace innecesaria la realización de analítica y los antecedentes familiares relatados no son indicación para la búsqueda de datos sugestivos de una posible infección por Helicobacter pylori, más allá de que la analítica solo mostraría datos inespecíficos.