La obstrucción intestinal es consecuencia de múltiples procesos y/o malformaciones, como la enfermedad de Hirschsprung, no un diagnóstico en sí mismo. La imagen radiológica depende de la localización de la obstrucción y de la acumulación de gas proximal a esta.

La enterocolitis necrotizante está asociada a la prematuridad de forma directa, pero con inicio más tardío que la perforación intestinal espontánea (SIP, por sus siglas en inglés) (7-15 días). Suele presentar mayor repercusión clínica. Los hallazgos de laboratorio suelen ser más significativos (anemia, trombocitopenia, coagulopatía). Los hallazgos radiológicos son útiles, pero no patognomónicos (neumatosis intestinal, edema de asas, asa fija, signos de perforación intestinal, gas en vena porta)¹.

La perforación intestinal espontánea (SIP, por sus siglas en inglés) ocurre principalmente en recién nacidos pretérmino con muy bajo peso al nacimiento. Se presenta de forma precoz o tardía, siendo más frecuente entre los 7-10 días. Se han descrito diversos factores de riesgo, siendo la prematuridad el mejor establecido. Su localización típica es el íleon terminal. Cursa con distensión abdominal acompañada en ocasiones de cambio de coloración abdominal (azulada), sin eritema o induración. A nivel radiográfico presentan neumoperitoneo sin neumatosis intestinal (figuras 1 y 2). Los hallazgos de laboratorio son inespecíficos^2-4. El tratamiento es prioritariamente quirúrgico, aunque en la bibliografía se refleja que muchos equipos quirúrgicos prefieren mantener inicialmente una actitud no intervencionista, dado que existe la posibilidad de una resolución espontánea. En el caso de nuestro paciente, se inició antibioterapia empírica de amplio espectro con cobertura para perforación intestinal y se optó por una actitud expectante de entrada. A las 48 horas, dada la no mejoría del neumoperitoneo, se interviene quirúrgicamente practicándose una resección intestinal y una ostomía de descarga con reconstrucción en segundo tiempo al alcanzar los 2 kg de peso, presentando buena evolución posterior.

La atresia duodenal cursa con clínica de obstrucción intestinal alta. La radiografía de abdomen es característica, presentando el “signo de la doble burbuja”⁵.