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Artículo original:
Bercedo Sanz A, Guerra Pérez MT, Callén Blecua MT; Grupo de Vías Respiratorias (GVR). El pediatra de Atención Primaria y la rinitis alérgica. Rev Pediatr Aten Primaria. 2024;26:193-7.
La rinitis alérgica (RA) impacta sobre la calidad de vida y sus síntomas característicos incluyen prurito nasal, rinorrea, estornudos y congestión nasal, que pueden acompañarse de síntomas óticos, faríngeos y oculares (rinoconjuntivitis alérgica). Los ácaros del polvo y los pólenes son los alérgenos mayoritarios. El diagnóstico requiere una historia clínica de los desencadenantes ambientales, el entorno del niño y mascotas. Se aconseja realizar el estudio alergológico, sobre todo en la rinitis persistente. El tratamiento se basa en el control ambiental de los alérgenos específicos y el uso escalonado de medicamentos que disminuyan los síntomas. Los corticoides nasales son imprescindibles en la RA moderada-grave y, si no hay una respuesta adecuada, se asociará antihistamínico (AH). Los AH intranasales son más eficaces y rápidos que los AH orales y forman parte del tratamiento de la RA estacional e intermitente. La inmunoterapia se utilizará en pacientes seleccionados y no respondedores a otros tratamientos.
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