Respuesta correcta. La atresia de esófago (AE) constituye la falta de continuidad del lumen del esófago, asociada en la mayoría de los casos (tipo II, III y IV según la clasificación de Ladd2) a la existencia de una fístula traqueoesofágica. Es un defecto congénito incompatible con la vida, que con tratamiento quirúrgico eficaz y oportuno permite la supervivencia. En el 50% de los casos esta anomalía se asocia con otras malformaciones como las cardiacas, vertebrales, anorrectales y renales3. En nuestro paciente, el diagnostico se realizó tras la evidencia de rechazo a las tomas, sialorrea abundante y la imagen típica de falta de progresión de la sonda nasogástrica alojada en el bolsón esofágico superior que se aprecia en la radiografía del paciente.
Bibliografía
- Shaw-Smith C. Oesophageal atresia, tracheo-oesophageal fistula, and the VACTERL association: review of genetics and epidemiology. J Med Genet. 2006;43:545-54.
De igual manera, la radiografía simple de abdomen aporta datos adicionales a este diagnóstico, al presentar la imagen de una burbuja gástrica única, con ausencia de gas distal, dato que, junto a la distensión del hemiabdomen superior, va a favor de la patología obstructiva, más típica de una atresia pilórica; sin embargo, el diagnóstico diferencial más probable corresponde a la atresia duodenal.
La atresia pilórica es una rara patología que ocurre en 1:100 000 nacidos vivos y suele presentarse clínicamente con vómitos no biliosos, asociando una imagen radiológica típica de burbuja gástrica única, que se observa hasta en el 90% de los casos. Suele presentar mal pronóstico, sobre todo cuando se asocia a epidermólisis bullosa4.
En este paciente se llevó a cabo una fibrobroncoscopia (FB) mediante la cual se identificó una amplia fístula traqueoesofágica a nivel de la carina, a través de la cual se accedió empleando un fibrobroncoscopio de 2,8 mm hasta el estómago y la porción proximal del duodeno, que permitió realizar el diagnóstico de atresia duodenal. Posteriormente, se llevó a cabo una toracotomía posterolateral derecha, cierre de la fístula traqueoesofágica y anastomosis esofágica terminoterminal. En el mismo acto quirúrgico se practicó una laparotomía supraumbilical derecha, que evidenció atresia de la segunda porción duodenal por páncreas anular completo (asociado a malformaciones del tubo digestivo, como AE en el 70% de los casos), por lo que se realizó una anastomosis duodenoduodenal en diamante, dejando una sonda transanastomótica que serviría posteriormente para la alimentación enteral precoz del paciente.