Respuesta correcta. La succión del pezón y el vaciado de la mama son los dos mecanismos más importantes para estimular la producción de prolactina y oxitocina, y asegurar de esta manera una adecuada producción y flujo de leche materna. Por ello, el lactante debe ser amamantado siempre que demande, todo el tiempo que demande, tanto de día como de noche. La lactancia a demanda asegura la producción de leche que el bebé precisa para un crecimiento satisfactorio.

No es correcta. El empleo de medicamentos que aumentan la producción de leche se debe reservar para aquellas situaciones en las que no se han logrado resultados positivos con medidas naturales, como aumentar la frecuencia de las tomas en un entorno tranquilo y asegurar que el agarre al pecho es correcto.

No es correcta.

Se trata de una pauta errónea que desgraciadamente todavía siguen recomendando algunos profesionales y que va en contra la lactancia.

No se deben establecer horarios rígidos para las tomas. Se recomienda que el bebé succione el pecho de su madre con la frecuencia que desee, tanto de día como de noche, de esta manera se asegura que recibe la cantidad de leche que necesita y se evita la ingurgitación mamaria. Tampoco se debe limitar la duración de la toma, para no impedir que el niño ingiera la leche del final de la tetada, que tiene una concentración mayor de grasa. Por ello se recomienda que el niño vacíe bien un pecho antes de ofrecer el otro. Muchos toman solo de un pecho cada vez. Lo importante no es que mame de los dos pechos, sino que vacíe bien cada uno de ellos alternativamente.

No es correcta. Salvo en situaciones concretas que obligan a la separación madre-hijo o madres de bebés prematuros, no es necesaria la extracción con sacaleches para garantizar una producción adecuada a las necesidades del recién nacido.