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Puntos clave

  • Se considera pubertad precoz a la aparición de caracteres sexuales secundarios antes de los ocho años en niñas y de los nueve años en niños o presentación de la menarquia antes de los diez años.
  • Es imprescindible hacer un diagnóstico diferencial entre pubertad precoz y variantes de la normalidad. Para ello, hay que valorar, en primer lugar, la edad ósea y los cambios en la velocidad de crecimiento.
  • En niñas, la causa más frecuente de pubertad precoz central es la idiopática, con frecuencia de origen familiar, y de pubertad precoz periférica son los quistes ováricos autónomos. Hay que tener cuidado con los niños, ya que en ellos las causas orgánicas son más frecuentes.
  • El test de LHRH es la prueba hormonal más importante ante una sospecha de pubertad precoz.
  • El tratamiento de la pubertad precoz tiene como objetivo evitar el impacto psicológico de una pubertad temprana y mejorar el pronóstico de talla final. Por ello la indicación de tratamiento se hará siempre de forma individualizada.
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