La PL crónica se caracteriza por una erupción cutánea generalizada descamativa, sin necrosis ni cicatrización, que puede persistir durante años y que en general cursa sin sintomatología sistémica.
Muchos pacientes desarrollan cuadros intermedios entre ambas formas de PL, siendo en la actualidad consideradas como dos polos de un mismo proceso cutáneo.
En nuestra paciente, una vez realizado el diagnóstico de pitiriasis liquenoide y varioliforme aguda, se pautó tratamiento con eritromicina oral a 40 mg/kg/día durante tres meses. Presentó una evolución favorable, desapareciendo la fiebre a los cinco días de inicio del tratamiento y con resolución completa de las lesiones al final del mismo. A día de hoy, seis meses después, no ha presentado reagudizaciones.
No hay comentarios