Dada la extraña evolución se rehace la anamnesis.
Los padres describen las manchas como de diferentes colores y morfologías, “a veces en forma de cruces”, y sobre todo referidas a la cara, el cuero cabelludo, el pelo, las manos y las extremidades superiores e inferiores. En las fotografías que aportan se pueden ver claramente las manchas de color rojo, azul y morado en los labios, alrededor de un ojo, en antifaz, en la frente, en los antebrazos, las palmas de las manos, las piernas e incluso mechones de pelo, afectando en algún momento a toda la cara de color morado más intenso, en distintos estadios evolutivos (distintas tonalidades, según van desapareciendo…). Los padres refieren que la mayor parte de ellas se quitan con agua, que huelen a acetona a veces y que tiñen la ropa al quitarla. El padre nos comenta que cuando tuvo la cara morada estuvo varios días sin ir al colegio.