Puntos clave

• La disfagia se define como cualquier dificultad o anormalidad en la deglución. Dentro de su etiología en la infancia, encontramos entidades frecuentes como la estomatitis y faringitis. Pero existen causas menos comunes que se deben descartar por ser potencialmente letales, como la ingesta de cuerpo extraño o la infección del sistema nervioso central.
• Los enterovirus pueden producir desde infecciones banales hasta cuadros más graves como infecciones respiratorias o neurológicas que pueden amenazar la vida.
• Su transmisión es feco-oral o ambiental. Pueden permanecer en faringe y en heces durante varias semanas.
• La situación epidemiológica reciente debe hacernos sospechar de infección por enterovirus ante clínica de meningoencefalitis.
• Ante la sospecha de una encefalitis por enterovirus, se debe valorar recogida de muestras en faringe y heces, además del LCR, ya que su rendimiento es mayor al ser zonas de replicación de este.
• Se debe realizar tempranamente una resonancia magnética ante un cuadro compatible de encefalitis porque puede ayudar a determinar el diagnóstico definitivo o de confirmación.