En este estadio fisiológico se encuentra alterado el lado de circulación cutánea. Este lado del triángulo evalúa la función cardiaca y la correcta perfusión de los órganos. Los principales indicadores que hay que valorar son: palidez, cianosis y cutis reticular. El lado de la circulación no se encuentra alterado en nuestra paciente.

En este estadio fisiológico se encuentran alterados los lados de circulación cutánea y apariencia. Nuestra paciente presenta una alteración del lado de la apariencia sin alteración del lado de circulación cutánea.

En este estadio fisiológico se encuentran alterados los lados de trabajo respiratorio y apariencia. Nuestra paciente presenta alteración de la apariencia, pero no presenta trabajo respiratorio. Los indicadores más importantes de este lado del TEP son: ruidos patológicos (gruñido, ronquera, disfonía, estridor, quejido, sibilancias) y signos visuales (tiraje, retracciones, aleteo nasal, cabeceo, taquipnea, posición anómala).

La paciente presenta una parálisis facial y una paresia del miembro superior izquierdo, por lo que tiene alterado el lado de la apariencia. Los lados correspondientes a trabajo respiratorio y circulación cutánea no se encuentran alterados, por lo que el estadio fisiológico que le corresponde es una alteración del sistema nervioso central (SNC). La apariencia es un indicador del nivel de perfusión y oxigenación cerebral. Cuando se encuentra alterado, es signo de una disfunción primaria del SNC. Hay varios indicadores a valorar dentro de este lado del TEP, siendo los más importantes: tono, reactividad, consuelo, mirada, lenguaje/llanto.