La primera paciente ha evolucionado sorprendentemente bien, actualmente tiene 9 años y presenta una inteligencia normal, realiza actividad física adecuada a su edad y tiene buena calidad de vida, aunque presenta crisis oculógiras ocasionales, y tiene algunas dificultades de aprendizaje y del estado de ánimo.
La segunda paciente, aunque inicialmente mejoraron las crisis oculógiras y la hipotonía, actualmente, con 2 años presenta importante retraso en el desarrollo, tanto motor como cognitivo, pese a diversos ajustes terapéuticos.
No hay comentarios