Puntos clave

• El diagnóstico diferencial de vómitos en el recién nacido incluye diferentes patologías tanto sistémicas (infección, metabolopatías) como digestivas (estenosis de píloro, obstrucción intestinal).
• La malrotación intestinal puede manifestarse de forma aguda en el periodo neonatal como una entidad grave por la presencia de vólvulo intestinal, pero también puede presentarse más larvada como intolerancia digestiva, con cuadro de vómitos y diarrea.
• El cuadro clínico suele consistir en vómitos, al inicio alimenticios que se convierten, en biliosos y en ocasiones hemorrágicos, acompañado de distensión abdominal y alteración del estado general.
• La secuencia diagnóstica lógica de la malrotación intestinal suele ser: sospecha clínica, exploración física completa, radiografía simple de abdomen, ecografía abdominal y tránsito gastrointestinal.
• El tratamiento de la malrotación intestinal, sobre todo si cursa con obstrucción intestinal por volvulación, es quirúrgico. Se realiza desvolvulación, liberación de adherencias y bandas de Ladd, apendicectomía y colocación del intestino malrotado.