En la radiografía de tórax de un niño de cuatro años observamos una ocupación del mediastino de contornos lisos, pero tenemos dudas de si se trata realmente del timo. ¿Qué prueba de imagen debemos solicitar en primer lugar?
No es correcta. La radiografía lateral de tórax podría confirmar la localización en mediastino anterior, pero no podremos descartar otras lesiones de esa localización (linfoma, teratoma...).
Respuesta correcta.
Ante dudas razonables, en pacientes mayores de 2-3 años, sin los signos típicos de la vela o la oleada tímica, debemos solicitar en primer lugar una ecografía torácica, que es una prueba accesible y libre de irradiación. La ecografía, aunque solo sea posible la visualización parcial del mediastino anterior, puede identificar el patrón de ecoestructura típico del timo, y así aclarar nuestra cuestión. Si no identificamos ese patrón o la exploración no es concluyente, se deberá proseguir en el estudio con otras técnicas de imagen.
No es correcta. Si la ecografía no confirma un patrón ecográfico típico del timo, deberemos completar el estudio mediante TC torácica, con contraste intravenoso para poder diferenciar la tumoración de los grandes vasos mediastínicos y valorar adecuadamente su localización y extensión.
No es correcta. La RM tiene una disponibilidad limitada, y pese a la importante ventaja de la no irradiación de nuestro paciente, tiene considerables inconvenientes, como es el tiempo prolongado de exploración y por tanto necesidad de sedación/anestesia en pacientes de esa edad, que posiblemente sí puedan colaborar para la realización de una TC.
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