Cuándo derivar

Se aconseja el manejo inicial de la depresión mayor leve en niños y adolescentes en Atención Primaria, siempre que no haya ideas o conductas autolíticas, o no existan factores de riesgo o comorbilidades que por su importancia aconsejen su derivación a atención especializada en salud mental.

Si durante dicho periodo de observación activa la sintomatología se agrava, o si persiste al cabo de 4 semanas, se recomienda su derivación a un servicio de atención especializada en salud mental de niños y adolescentes.

Todo niño o adolescente con depresión mayor moderada o grave deberá ser derivado inicialmente a un servicio especializado en salud mental de niños y adolescentes.

El tratamiento se realiza en general de forma ambulatoria. Debería considerarse la opción de derivación a un hospital de día o el ingreso en una unidad de hospitalización adecuados a estos grupos de edad:

• Si se asocian factores de riesgo o comorbilidades graves que lo indiquen.
• En la depresión grave cuando existen razones que dificultan un adecuado seguimiento y control ambulatorio.
• En la depresión grave que no responde al tratamiento.

Debe considerarse especialmente el ingreso en una unidad de hospitalización:

• Si la depresión es muy grave (cuando se acompaña de síntomas psicóticos, u otros síntomas graves como falta de apetito con gran pérdida de peso o cansancio extremo).
• Si existe un elevado riesgo de suicidio.

Recuerda