Neutropenia secundaria a fármacos:

Produce una neutropenia grave con frecuentes complicaciones infecciosas. Se presentan en general a los 7-14 días de la primera exposición o inmediatamente después de la reexposición y suelen recuperarse al retirar el fármaco sospechoso. Cualquier fármaco es capaz de inducir una neutropenia a consecuencia de una reacción idiosincrásica, aunque el 70% de los casos se limita a un grupo reducido.

• Analgésicos-antiinflamatorios: ibuprofeno, aminopirina, fenilbutazonas, indometacina, ácido acetilsalicílico, paracetamol, diclofenaco, metamizol, naproxeno, piroxicam.
• Antimicrobianos: cloranfenicol, penicilina y β-lactámicos, sulfonamidas, cotrimoxazol, aciclovil y ganciclovir, ciprofloxacino, cindamicina, etambutol, gentamicina, rifampicina, vancomicina.
• Anticomiciales: fenitoína, carbamacepina, ácido valpróico, etosuximida.
• Cardiovasculares: hidralazina, procainamida, quinidina, amiodarona, captopril, digitálicos, furosemida, hidralacina, nifedipino.
• Antipsióticos, sedantes y antidepresivos: fenotiazinas, clorpromazina, diacepam, haloperidol.
• Citostáticos.
• Otros: ranitidina, cimetidina, ácido retinóico, propiltiouracilo.

La neutropenia crónica más frecuente en la infancia es la neutropenia autoinmune o la neutropenia crónica benigna de la infancia. Sigue un curso benigno y suele ser autolimitada, la mayoría recuperan cifras de neutrófilos normales a los 2 años del diagnóstico. La ausencia de anticuerpos antineutrófilos no excluye el diagnóstico.

Neutropenia viral:

Es la causa más frecuente de neutropenia transitoria de la infancia y de neutropenia posinfecciosa. Suele coincidir con la fase de viremia y resolverse en una semana. No suele asociar infecciones bacterianas importantes.

• Virus respiratorio sincitial.
• VHA, VHB y VHC.
• Influenza A y B.
• VEB.
• Sarampión.
• CMV.
• Rubeola.
• Parvovirus B19.
• Parotiditis.
• VIH.
• Virus varicela zóster.
• Virus del Dengue.
• Virus Herpes humano tipo 6.
• Arbovirus.