Tratamiento
El objetivo terapéutico es eliminar el componente inflamatorio muscular y prevenir la alteración de otros órganos afectos por la enfermedad. El tratamiento de primera línea consiste en prednisona 0,5-1 mg/kg/día (máximo 80 mg/día) 2-4 semanas asociado o no a metotrexato (MTX) 15 mg/semana (máximo 25 mg/semana) o a azatioprina (AZT) 0,5-3,0 mg/kg/día. En casos de predominancia de afectación cutánea será de utilidad la hidroxicloroquina a 5 mg/kg/día, así como la protección solar. Si hay mala respuesta a la terapia combinada con corticoides e inmunosupresores (MTX/AZT) se considerará el uso de fármacos biológicos como el rituximab dejando la plasmaféresis en el último escalón terapéutico.
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