Muchas enfermedades que cursan con fiebre y exantema pueden producir afectación de palmas y plantas, en sí no es patognómonico de ninguna enfermedad. Puede orientarnos hacia un diagnóstico clínico, pero no indica que la enfermedad sea más o menos grave.

El estado general del niño es el dato más importante a la hora de decidir cuál será nuestra conducta a seguir ante un paciente con exantema y fiebre en Urgencias. Una aproximación inicial sería aplicar el triángulo de evaluación pediátrica durante 30 segundos. Consiste en oír y ver sin tocar al niño centrándonos en tres aspectos:

• Apariencia
• Circulación
• Respiración

Algunos estudios han demostrado que estas escalas no son superiores a la observación y el juicio subjetivo del médico. La alteración del estado general ante un niño con exantema y fiebre supone el ingreso del mismo para tratamiento u observación.

Un exantema con fiebre de menos de 12 horas de evolución es de evolución impredecible, por este motivo estos niños tal vez sean susceptibles de observación. Un exantema que lleva varios días de evolución es infrecuente que sea la manifestación de una enfermedad que requiera atención urgente.

La lengua en fresa y la adenopatía laterocervical no son patognomónicas de ninguna enfermedad. Podría orientarnos hacia una escarlatina o hacia una enfermedad de Kawasaki si se cumplen más criterios clínicos.